La delegada territorial de Salud y Familias ha asistido a una sesión sobre alimentación y cocina saludable, a cargo del cocinero del restaurante ‘Juanito’, de Baeza, Pedro Salcedo, dentro de la campaña europea que organiza la Comunidad Europea de Cocineros Euro-Toques, en la 26 edición del Día del Gusto, que se ha desarrollado en el centro ‘Alhucema’ de Entrepinares del Mercadillo, en el municipio de Torredelcampo.
Durante la sesión, el destacado chef ha ofrecido una clase especial, enseñando a usuarios, familiares y profesionales a saborear los alimentos, degustarlos y conocer los diferentes sabores. En el encuentro, se ha hecho especial hincapié en la importancia de una alimentación equilibrada, sana y saludable, así como compaginarlo con la actividad física. Como valor añadido, se trata de potenciar tanto frutas como verduras y otros ingredientes de temporada.
“La alimentación saludable en la población es el mayor regalo para nuestra salud y la de las futuras generaciones, junto a la actividad física, puesto que no hay mejor medida para prevenir la enfermedad que cuidar nuestros alimentos y una vida activa”, ha destacado la delegada territorial de Salud y Familias, Trinidad Rus.
En este sentido, el Plan para la Promoción de la Actividad Física y la Alimentación Equilibrada de la consejería de Salud y Familias, tiene como eje central el fomento de la práctica de actividad física y la alimentación equilibrada entre la población andaluza, como medidas para prevenir la enfermedad y la discapacidad, y mejorar la calidad de vida de los andaluces y andaluzas. Para su logro, se plantean una serie de objetivos operativos en función de la población destinataria y/o ámbito de intervención identificado: población general, servicios sanitarios, ámbito educativo, entorno laboral e industria alimentaria y restauración.
Entre los objetivos dirigidos a la población general destacan el conocimiento por parte de la población andaluza de las ventajas derivadas de la realización de actividad física y de los beneficios de una alimentación equilibrada; de los conocimientos necesarios para poder hacer una lectura correcta del etiquetado y una conservación correcta de los alimentos; y del acceso a la información que les permita hacer una valoración correcta de los mensajes publicitarios en los que la alimentación y el ejercicio se tomen como valores, así como de las prácticas de riesgo más difundidas dentro de la población.
Para el desarrollo del Plan es fundamental la participación directa de la ciudadanía, de forma que el programa cumplirá sus objetivos si los andaluces y las andaluzas logran no sólo mejorar su alimentación y estado físico, sino disfrutar con ello, en la conciencia de que así se está consiguiendo además reducir los riesgos de padecer graves enfermedades.
