Viña Albali Valdepeñas y ElPozo Murcia Costa Cálida llegaban a la cita de las semifinales dispuestos a dejarse la piel sobre la pista de la RFEF. La garganta ya se la dejaban las aficiones en la grada. El choque no pudo ser más igualado en la primera mitad, con pocas ocasiones en ambas porterías a causa de las defensas y de las imprecisiones en ataque.
Solamente podía desatascarse de una manera: a balón parado. Y el encargado de inaugurar el marcador iba a ser Gadeia, que transformaba un lanzamiento desde los diez metros para llevarse esa ventaja a vestuarios.
Mismo guion al comenzar el segundo periodo, con duelos intensos. Y continuando con la tónica del partido, volvió a marcar ElPozo a balón parado. Taynan, autor en este caso, con un lanzamiento de falta raso que no acertaba a tocar Edu. Minutos más tarde y tras la revisión de la jugada, el equipo arbitral señaló penalti a favor del conjunto vinatero. Bateria no perdonaba y se acercaban a su rival, aunque solo por unos instantes.
Gadeia culminaba una gran jugada colectiva que Edu conseguía repeler en primera instancia, pero el balón caía en las botas del 31 para perforar la red. Con ese tanto dejaba claro el equipo de Diego Giustozzi que el encuentro ya no se le escapaba. Eso sí, tocaba sufrir, ya que Bateria dispondría de un doble penalti que no se materializaba.
El fallo se convertía en una inyección de moral para los murcianos, que reaccionaban de inmediato con la cuarta diana con una contra orquestada por Felipe Valerio que acababa en las botas de Darío Gil para sentenciar la eliminatoria. Todavía veríamos un gol de Ivi con ataque de cinco y otro de Alberto en la otra portería.