El Museo Íbero de Jaén ha dedicado un espacio al recuerdo a los represaliados de la dictadura franquista en la antigua cárcel, recordemos que sobre su solar se levanta esta oferta cultural. Este espacio lo protagoniza por una escultura de Miguel Fuentes del Olmo.
Está situada en un pequeño jardín a la derecha de la entrada, se trata de una escultura expresionista fundida en bronce colocada sobre un pedestal de acero que representa una figura humana que cae al suelo. Aparece casi suspendida, con los brazos en alto intentando protegerse de los golpes, pero con los ojos abiertos, manteniendo su dignidad, según ha comentado su autor.
En el acto de su descubrimiento de este espacio participaron el consejero de Fomento y vivienda en funciones, Felipe López; el presidente de la Diputación, Francisco Reyes, y el presidente de la Asociación de la Memoria Histórica de Jaén, Miguel Ángel Valdivia.