Francisco Reyes ha suscrito con Manuel Parras, presidente de la Federación de Productores de Aceite de Oliva de Jaén, un convenio para seguir apoyando esta iniciativa en 2020.
El presidente de la Diputación Provincial de Jaén, Francisco Reyes, ha firmado con el presidente de la Federación de Productores de Aceite de Oliva de Jaén, Manuel Parras, un convenio de colaboración para que el proyecto de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Aceite de Jaén “siga avanzando porque es una iniciativa muy importante para nuestra tierra”. Así lo ha subrayado Reyes tras rubricar un acuerdo que se traducirá en una aportación de 20.000 euros para la realización de diferentes acciones en 2020 que es necesario llevar a cabo aún para consolidar esta IGP.
Esta partida económica, que se suma a otras previas también concedidas por la Administración provincial a esta entidad, permitirá que se “siga trabajando y afianzando un proyecto que desde la Diputación siempre hemos entendido como estratégico para la provincia de Jaén”. En esta línea, Reyes, que ha estado acompañado en este acto por el diputado de Agricultura, Ganadería, Medio Ambiente y Cambio Climático, Pedro Bruno, ha recordado que “cuando este proyecto comenzó su andadura hace diez años con Juan Balbín a la cabeza, no dudamos en respaldarlo porque estaba ligado a la mejora de la calidad del aceite de oliva jiennense, una calidad que se ha elevado en estos años, como se refleja en los numerosos aceites tempranos que se presentan en la Fiesta del Primer Aceite de la provincia de Jaén o la cata-concurso Jaén Selección”.
La constitución de esta IGP, pese “a los retrasos que ha acumulado, ha sido un hito muy importante, fruto de la colaboración de todos, desde las administraciones: Gobierno de Andalucía, de España y la Diputación; hasta algunos europarlamentarios que han estado pendientes de este expediente, y por supuesto los técnicos que lo han elaborado”, según ha resaltado Francisco Reyes. A partir de ahora, ha añadido, “contaremos con un instrumento que se sumará a los que ya existen, a las tres denominaciones de origen de la provincia, porque son compatibles y trabajarán para mejorar la calidad de los aceites de oliva de la provincia”.
Precisamente este ha sido uno de los puntos en los que más ha insistido el presidente de la Diputación, porque “de esta nueva herramienta se beneficiarán los 97 municipios de la provincia siempre que los aceites que se produzcan cumplan los requisitos de calidad que se establezcan, ya que las denominaciones de origen existentes hasta ahora solo certifican vírgenes extra de zonas determinadas y vinculadas a nuestros parques naturales”.
Francisco Reyes ha terminado “felicitando” a Manuel Parras “y a todas las personas que han pasado por esta entidad” por lograr esta IGP que “posibilitará que podamos diferenciar los AOVEs de nuestra provincia de otros y continuar mejorando su calidad”. Para ello, ha mostrado el “compromiso de la Diputación en los próximos años para seguir apoyando esta IGP igual que llevamos haciendo mucho tiempo con las tres denominaciones de origen jiennenses”.
Por su parte, Manuel Parras ha “agradecido a la Diputación el apoyo que nos ha prestado en los últimos años”, un respaldo que ha valorado como “necesario porque hasta ahora no teníamos muchas posibilidades de obtener los recursos financieros que precisábamos para llevar a cabo este proyecto”. Estos recursos se han destinado hasta el momento para obtener este sello de calidad, con el que se reconocen “las características especiales de nuestros aceites, ese picor y amargor propios que otorga el terreno y la orografía jiennense”, pero también “para defender la palabra Jaén frente a otras empresas interesadas en registrarlas para aprovechar el valor que ahora está adquiriendo”.
Aunque aún restan 3 meses para que esta IGP logre el reconocimiento definitivo, ya que este es el periodo de tiempo en que se pueden presentar alegaciones, Parras se ha mostrado optimista de cara a que “en la próxima campaña ya podamos certificar aceites de oliva con este sello”. En este tiempo, se deberá constituir un consejo regulador provisional y después de un año se convocarán elecciones para elegir a su órgano rector, que deberá enfrentarse a los principales objetivos de esta IGP, que según Parras deben pasar por que “el consumidor sea capaz de pagar un precio mayor por los aceites de oliva que cuenten con esta marca de calidad”.
