Es importante exigir siempre el ticket o factura y conservarlo adecuadamente de cara a posibles reclamaciones o devoluciones.
La Dirección General de Consumo recomienda a la ciudadanía planificar las compras navideñas para adquirir únicamente lo que realmente se necesita, evitando las prisas de última hora y las compras compulsivas e improvisadas, y apostando por un consumo responsable y una moderación del gasto. Organizar las compras con la mayor antelación posible permite comparar ofertas entre distintas marcas y compañías para adquirir productos a mejor precio o con una mejor relación calidad precio.
En este sentido, siempre es recomendable realizar una lista de la compra para planificarse adecuadamente, así como fijar un presupuesto al que ajustarse a la hora de comprar para evitar gastar más dinero de la cuenta. También puede ser adecuado realizar las compras en efectivo, en lugar de con tarjeta, ya que de esta forma se evitará la tentación de gastar más de lo debido.
En el caso de la comida, se puede organizar un menú equilibrado, saludable y de calidad sin necesidad de adquirir los productos de mayor precio, ya que son muchas las alternativas que se pueden encontrar en el mercado con un precio más económico. Además, para evitar las subidas de los precios que se suelen producir en estas fechas, es conveniente anticipar la compra de los productos no perecederos y, en el caso de los perecederos que se compren con antelación, poner especial cuidado en su conservación, por ejemplo, a través de la congelación.
Elementos de decoración navideña
En cuanto a los elementos de decoración navideña, es conveniente, en primer lugar, recuperar los adornos de años anteriores que estén en buen estado, o directamente optar por fabricar los adornos uno mismo. En el caso del árbol de Navidad, no se debe cortar directamente del monte, sino adquirirlo en viveros especializados u optar directamente por un árbol artificial que podrá ser reutilizado de un año a otro.
Se debe tener especial precaución a la hora de adquirir guirnaldas luminosas, por su potencial riesgo para la seguridad. Por ello, es recomendable comprar estos productos en establecimientos de confianza, verificando que presentan un etiquetado completo y, al menos, en castellano. La etiqueta debe indicar las instrucciones de utilización, potencia nominal y normas para el cambio de bombillas si éstas son reemplazables.
Asimismo, las guirnaldas deben llevar el marcado CE de seguridad, e indicar en el embalaje si son para uso interior o exterior, en cuyo caso se debe comprobar que presentan un recubrimiento resistente a lluvia y humedad (si una luminaria no indica de manera expresa que son aptas para uso exterior, no deben instalarse en fachadas ni en zonas expuestas a inclemencias meteorológicas).
Si se utilizan las de años anteriores, se deben revisar cuidadosamente tanto las bombillas, como las conexiones y el cable, comprobando su correcto funcionamiento. Si las bombillas son reemplazables, se deben sustituir por otras del mismo voltaje, siempre con la luminaria desconectada de la red eléctrica. Las guirnaldas deben ser colocadas en lugares alejados de fuentes de calor, materiales inflamables y otros elementos que puedan sobrecalentarse. Igualmente, se deben ubicar lejos del alcance de niños y niñas, y apagar a la hora de dormir o al salir de casa.
Información sobre cambios y devoluciones
Desde Consumo, se recuerda que antes de comprar un producto o contratar un servicio es importante informarse sobre la política de cambios y devoluciones, que depende de cada establecimiento. Salvo que el producto esconda un desperfecto o deterioro, la empresa no está obligada a devolver el dinero, pudiendo, en este caso, optarse por otras formas de restitución como ofrecer un vale por el valor del producto que ha sido devuelto. En el caso de las compras por Internet existe el derecho de desistimiento, que permite, con carácter general, cancelar el contrato durante un plazo mínimo de 14 días naturales desde la fecha de recepción del producto, sin tener que alegar motivo alguno y sin penalización.
Siempre es importante conservar la factura o el justificante de compra o transacción efectuada, ya que es imprescindible para posibles reclamaciones o devoluciones. Asimismo, es recomendable, siempre que sea posible, realizar las compras en establecimientos adheridos al Sistema Arbitral de Consumo, ya que de esta manera se garantiza que cualquier posible discrepancia pueda quedar resuelta de forma rápida y gratuita, sin necesidad de acudir a los Tribunales. Igualmente, se recuerda que todos los establecimientos que presten servicios en Andalucía deben contar con hojas oficiales de quejas y reclamaciones a disposición de las personas consumidoras y usuarias que las soliciten, y exhibir un cartel que anuncie claramente su existencia.
Compras seguras por Internet
Si se opta por realizar las compras por Internet se deben tener en cuenta una serie de precauciones para evitar riesgos de seguridad. En primer lugar, es conveniente elegir páginas seguras para realizar las compras, para lo que se debe comprobar que en la dirección aparece ‘https’ en lugar del ‘http’ habitual, o que aparece en la pantalla un candado cerrado o una llave entera. También es importante asegurarse de poder identificar de forma adecuada al responsable de la página web o proveedor, a través de su nombre, domicilio y NIF, así como leer con detenimiento los apartados que hacen referencia al aviso legal y a los términos y condiciones de la venta.
A la hora de pagar, es conveniente hacerlo mediante tarjeta de crédito (siempre que no exista la posibilidad de hacerlo contra reembolso) porque de ese modo se puede exigir la anulación del cargo si surge algún problema. También es recomendable guardar copia de las operaciones de compra y de todos los mensajes intercambiados con la página web, por si hubiera que realizar alguna reclamación posterior.
Ante cualquier duda o consulta en materia de consumo, la ciudadanía puede contactar con Consumo Responde, un servicio gratuito de información y asesoramiento a las personas consumidoras y usuarias, impulsado por la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía. Se trata de un servicio multicanal, al que se puede acceder de forma continuada a través del número de teléfono 900 21 50 80, de la página web www.consumoresponde.es, del correo electrónico (consumoresponde@
También se puede recibir asesoramiento en los Servicios Provinciales de Consumo de las delegaciones territoriales de Salud y Familias presentes en todas las capitales de provincia, así como en las Oficinas Municipales de Información al Consumidor (OMICs) y en las organizaciones de personas consumidoras y usuarias.