Supone un 24% más de adolescentes e hijas e hijos que en 2018 han acudido a estos servicios especializados y gratuitos.
El Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) atendió en Jaén a 162 personas menores de edad en los diferentes programas de ayuda psicológica para adolescentes, hijas e hijos víctimas de violencia de género y violencia sexual en 2019, frente a las 130 de 2018; se trata de 32 personas usuarias más y un incremento del 24,61%. En estos programas se presta además asesoramiento y orientación a las familias, así que el número total de personas que han acudido a estos recursos en la provincia de Jaén son 267 frente a las 242 del año anterior, son 25 más y un aumento del 10,33%.
La asesora de programa del IAM en Jaén, María José De la Torre, ha explicado que “estos programas, especializados y gratuitos, están dirigidos a las menores y a su entorno familiar, buscan mejorar el bienestar psicosocial y atender las necesidades socioeducativas de las hijas e hijos de las mujeres que sufren o han sufrido violencia por parte de sus parejas o exparejas, así como intervenir de forma experta, mediante la atención psicológica individual y grupal, con las mujeres menores de edad que sean víctimas de violencia de género y/o violencia sexual”.
Asimismo, De la Torre ha puesto en valor el programa de atención en crisis a hijas e hijos de mujeres víctimas de violencia de género con resultado de muerte o gravemente heridas: “Se trata de un servicio pionero en España que pretende favorecer la recuperación emocional de las hijas e hijos de mujeres víctimas mortales de violencia machista y hacer frente a las múltiples consecuencias negativas que pueden sufrir estas y estos menores por su exposición a la violencia de género así como las graves secuelas que provoca el hecho traumático como es el asesinato de su madre”.
En concreto, en el Programa de atención psicológica a hijas e hijos de mujeres víctimas de violencia de género se dio cobertura a 114 menores y 73 madres, en total 187, frente a las 94 menores y 57 madres (151 en total) del año anterior, eso implica que se atendió a 20 menores más lo que deja un incremento del 21,27%. Este programa se dirige a menores de 0 a 17 años, incluyendo también la atención perinatal, es decir, desde la gestación, el parto, el postparto y la crianza de los 0 a 3 años así como el resto de la primera infancia (hasta los 5 años). Este servicio está dirigido específicamente a menores, pero también asesora a las madres con el objetivo de informarlas sobre los efectos psicosociales de la violencia machista en sus hijas e hijos, aprendan a identificar las señales de alarma previas a la reproducción de conductas de violencia, a mejorar las relaciones y la comunicación y, por último, orientar a estas mujeres sobre las pautas educativas más adecuadas en función de la edad. La franja de edad entre los 6 a 14 años es la que tiene más demanda con un total de 67 menores.
Mientras tanto, en el Programa de atención psicológica a mujeres menores de edad víctimas de violencia de género se atendió a 24 chicas en 2019, un ligero incremento con respecto a 2018 cuando acudieron a terapia 23 adolescentes, un 4,34% más. Asimismo se ha dado asesoramiento a 23 familiares. Este programa ofrece atención psicológica, individual y grupal a adolescentes de entre 14 y 18 años que sufren o han sufrido violencia de género en sus primeras relaciones de pareja, y además se orienta e informa a las madres, padres y/o tutores de las menores atendidas. Desde el año 2012, este programa ha atendido a 856 chicas víctimas de violencia de género de toda Andalucía dando de esta manera una respuesta a una necesidad social grave.
Como complemento a esta prestación, se puso en marcha el Programa de atención psicológica a mujeres menores de edad especializada en violencia sexual donde el pasado año se intervino con 24 adolescentes, frente a las 10 chicas de 2018, un 140% más. Además se asesoró a nueve familiares. Este servicio ofrece atención especializada para hacer frente a las consecuencias psicológicas derivadas de las agresiones y/o abusos sexuales sufridos por las menores usuarias. El programa está implementado con un equipo de psicólogas expertas en violencia de género y otro de sexólogas expertas en violencia sexual. Además, también se orienta y asesora a las familias. Estos grupos se consolidan año tras año.