Nuevo repunte de denuncias diarias en VioGén en la segunda quincena de mayo en Jaén

Del 1 al 15 del pasado mes, las altas diarias en el sistema se sitúan en una media de 3,35, por encima de las cifras registradas antes de la declaración del Estado de Alarma. Se confirma la tendencia ascendente durante el confinamiento, especialmente  desde el mes de mayo. La subdelegada del Gobierno en Jaén anima “a no bajar la guardia ante la violencia de género” y a hacer uso de los recursos del Plan de Contingencia, que declara como servicios esenciales durante el estado de alarma todos los servicios de asistencia integral.

El análisis realizado por la Unidad de Violencia sobre la Mujer de la Subdelegación del Gobierno ha registrado un repunte significativo de las altas en el número de denuncias registradas en este sistema VioGén en la segunda quincena de mayo, cuando ascienden a 3,35 altas diarias, 1’1 puntos por encima de la media de la primera quincena, como ha confirmado la subdelegada del Gobierno en Jaén, Catalina Madueño, a partir de la estadística elaborada por esta Unidad.

Desde principios del mes de abril, coincidiendo con las prórrogas del estado de alarma y del confinamiento, se registra una tenencia al alta en el número de altas diarias en este sistema, que integra toda la información de interés para las víctimas de la violencia de género para hacer una predicción del riesgo y realizar el seguimiento y la protección a las víctimas en todo el territorio nacional.

El número de altas registradas en el Sistema VioGen, procedentes de las denuncias presentadas ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado por violencia de género en la segunda quincena de mayo (del 16 al 31 de mayo), continúa aumentando en Jaén hasta alcanzar las 3,35 de media diaria, 1’1 puntos más que la cifra registrada primera quincena (del 1 al 15), cuando la media se situó en 2,28. Desde el inicio del estado de alarma, la media diaria de altas en el Sistema VioGen por denuncias de violencia de género objeto de seguimiento ha ido aumentado progresivamente, pasando de 0,50 en la segunda quincena de marzo –al inicio de confinamiento– a 1 en la primera quincena de abril; 1,62 en la segunda de ese mismo mes y 2,28 en la primera quincena de mayo.

Ya del 16 al 31 de mayo las 3,35 altas registradas reflejan un incremento respecto a las cifras anteriores del estado de alarma casi un punto más, cuando se contabilizaron 2,46 casos cada día. “Esta evolución significa que a pesar de que al principio del confinamiento la situación era de cierta incertidumbre, y por ello disminuyeron los casos diarios registrados, las campañas y herramientas puestas en marcha por el Gobierno de España para detectar y detener la violencia de género ha surtido los efectos que se perseguían y las víctimas han seguido denunciando a pesar del confinamiento”, ha subrayado el coordinador de la Unidad, Juan Manuel Alarcón, que ha recordado que “durante este período siempre ha estado permitida la movilidad para que tanto las mujeres como los hijos tuvieran garantizada su integridad”.

Según ha explicado el coordinador provincial de la Unidad, en los primeros 15 días de marzo se experimentó una bajada considerable “fruto de la incertidumbre de aquellas mujeres que no sabían cómo poner de manifiesto su situación, que no podían o desconocían cómo denunciar y pedir ayuda”.

A partir de este momento, se observa la incidencia del confinamiento, de ahí que en el marco del Plan de Contingencia elaborado por el Gobierno, declarara servicio esencial todos los servicios de asistencia integral a las víctimas de violencia contra las mujeres.

Esta medida implica que los operadores de los servicios esenciales deban garantizar el normal funcionamiento de los dispositivos de información 24h; la respuesta de emergencia y acogida a las víctimas en situación de riesgo, incluidas las mujeres que precisan abandonar el domicilio para garantizar su protección; el normal funcionamiento de los centros de emergencia, acogida, pisos tutelados, y alojamientos seguros para víctimas de explotación sexual y trata; y la asistencia psicológica, jurídica y social a las víctimas de manera no presencial (telefónica o por otros canales).

A este respecto la subdelegada del Gobierno en Jaén, Catalina Madueño, ha recordado que el carácter esencial de estos servicios se ha contemplado como una medida integral para la protección de un colectivo especialmente vulnerable durante el confinamiento y la desescalada y ha animado a los ciudadanos “a no bajar la guardia” ante la violencia de género.

Casos activos

De los 1.332 casos activos en Jaén a 31 de marzo de 2020, no hay ninguno uno riesgo extremo, 7 en riesgo alto y 147 en riesgo medio. Estos casos requieren una protección permanente de la víctima por parte de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y Policía Local (en aquellos municipios adheridos a la red VioGén), en función al nivel de riesgo para la integridad física y psíquica de la mujer amenazada. Los mayores niveles de riesgo implican un mayor nivel de protección de las víctimas, como el control intensivo de los movimientos del agresor, la protección permanente de la víctima y la vigilancia en los centros escolares de los hijos de la víctima.

Las llamadas al 016 continúan siendo destacablemente superiores a las registradas en las mismas fechas del pasado año, ya que en abril se han contabilizado un total de 79, mientras que en el mismo mes de 2019 esta cifra se situaba en las 49, lo que supone un crecimiento del 61,2%. En cuanto a los medios telemáticos o pulseras de control, a cierre del mes de abril se encuentran operativas 87, un 42,6% más que en el mismo mes de 2019, cuando se contabilizaban 61 dispositivos instalados.

También ha registrado un incremento en la provincia las usuarias del servicio Atenpro, que permite, mediante el uso de tecnologías de comunicación telefónica móvil y de telelocalización, que las mujeres víctimas de violencia de género puedan entrar en contacto en cualquier momento con un centro atendido por personal específicamente preparado para dar una respuesta adecuada a sus necesidades. Además, ante situaciones de emergencia, el personal del centro responde a la crisis planteada, bien por sí mismos o movilizando otros recursos humanos y materiales. Pues bien, en abril se han recibido 240 llamadas, mientras que en el mismo mes de 2019 fueron 220 las llamadas atendidas, una diferencia del 9%.