Los alertantes refirieron a los efectivos distintos daños al animal, desde golpes a la inmersión en una fuente cercana y que recriminaron al presunto maltratador su actitud en varias ocasiones. Personados en la zona los policías locales piden el perro al individuo para comprobar su estado. El presunto autor de los hechos, lejos de colaborar mostró una actitud más agresiva aún con el animal y amenazó con acabar con su vida antes de entregarlo. Los agentes consiguieron arrebatárselo pese ala resistencia del presunto maltratador, que fue posteriomente arrestado.
En cuanto al perro, un mastín de unos 5 meses, se encuentra en buenas condiciones al cuidado de unos de los vecinos que antes de la llegada de los agentes ya estaba tratando de evitar el episodio de maltrato animal.