El Patronato de Cultura ha reunido por primera vez al Comité de expertos de distintos ámbitos, como la Investigación, Historia, Arquitectura y la Restauración que será el encargado de la planificación de la intervención que mejor se adapte a la rehabilitación de la iglesia de San Miguel de cara a su conservación como ruina arqueológica.
Se trata de un proyecto enmarcado en una macrooperación de restauración de este barrio que incluye la construcción del Museo de la Ciudad de Jaén, en el antiguo solar de los Uribe, la mejora en calle y entorno, la señalización cultural y turística y la puesta en valor del patrimonio arqueológico que esconde la zona, todo ello con un montante que ronda los 5 millones de euros con cargo a la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrada (DUSI).
El alcalde, Julio Millán, ha participado en esta primera reunión telemática junto al concejal de Cultura, José Manuel Higueras. Forman parte de este órgano asesor en su sesión constituyente el catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Jaén, Pedro Galera; el catedrático de Historia y Arqueología Medieval de la Universidad de Jaén, Juan Carlos Castillo; el profesor de Historia del Arte de la Universidad de Jaén, Manuel Jódar; el arquitecto Rafael Hayas, en representación del Colegio de Arquitectos; la restauradora Teresa López; el presidente del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos, José Miguel de la Torre; el historiador, experto de la parroquia de San Miguel, José María Díaz, autor de publicaciones de referencia sobre este patrimonio de la ciudad, además de Vicente Barba, coordinador de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Jaén. Además, se ha acordado la inclusión de la Asesora Técnica de Proyectos Turísticos del Ayuntamiento de Jaén, Azucena Moreno, y de la teniente de alcalde y concejala de Presidencia, África Colomo, como responsable de Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (DUSI) cofinanciada con fondos Feder, programa con el que se acometerá el proyecto de recuperación de la iglesia.
“Este comité de expertos va a pilotar y conformar una comisión asesora para conocer hacia donde vamos en la recuperación de este patrimonio y su entorno, abandonado desde hace tanto tiempo”, ha dejado claro Higueras. Así, este comité será donde se aborde el estudio y diagnóstico de la iglesia y los inmuebles que la rodean, adquiridos por el Ayuntamiento y que esconden restos del templo. El proceso pasa también por el levantamiento fotogramétrico de la zona, estudios arqueológicos del subsuelo, la restitución de la antigua portada de la iglesia y la adecuación del entorno en aspectos como la peatonalización, la mejora de la accesibilidad, la señalización turística y cultural y la lematización del entorno.
En esta línea, Higueras se ha mostrado convencido de que, gracias a esta labor impulsada por el equipo de Gobierno, “poco a poco descubriremos el origen de la iglesia de San Miguel, la autoría de Andrés de Vandelvira y su papel en un barrio que, actualmente, está mal, pero en el que queremos restaurar tanto el templo como las calles anexas”.
El concejal ha trasladado a los participantes en el foro el objetivo de la Administración local de poner la zona en valor y, a su vez, ha recibido las aportaciones de los expertos consultados, como las que apuntan a que la ocupación en esta parte de la ciudad es muy temprana, como así lo demuestran los vestigios arqueológicos hallados. No en vano, hay restos de un palacio musulmán, muy próximo al solar de los Uribe, e, incluso, elementos de la época romana. Del mismo modo, los historiadores han apuntado a la intervención de Vandelvira en el edificio, como así lo demuestra la portada del templo que se conserva en el Museo Provincial. De igual modo, se ha recordado como la iglesia de pierde y el solar se reparte entre varias familias, que construyen sus viviendas, unos inmuebles que el Ayuntamiento ya ha recuperado puesto que el objetivo es devolver este espacio a la ciudadanía y convertirlo en ruina visitable que permita así su conservación. Y es que, en las primeras visitas técnicas realizadas, se han localizado partes de algunas de las capillas, de contrafuertes, del altar, de las bóvedas de crucería e incluso de frescos. Todo ello ha de ser analizado concienzudamente y valorar la forma de ponerlos en valor con técnicas que incluso contemplan la lectura paramental de la estructura de San Miguel.