La inversión, de más de 200.000 euros, conlleva la renovación de los accesos a los centros y establecimiento de controles en plantas.
El Hospital Universitario de Jaén ha finalizado la instalación de puertas automatizadas con control de acceso en las plantas de hospitalización 5ª y 6ª del Médico Quirúrgico, así como en la UCI y en la sala de Hemodiálisis de la unidad de Nefrología. De este modo, la entrada a determinadas zonas sensibles del centro eleva su nivel de seguridad, al tiempo que mejora la privacidad de estas áreas.
De la misma forma, se han renovado los accesos exteriores al Hospital Médico Quirúrgico, Materno Infantil, Centro de Diagnóstico y Neurotraumatológico, sustituyendo las puertas abatibles antiguas por nuevas automatizadas y renovando las motorizadas que ya existían en determinados puntos de estos centros.
“La intervención en las puertas exteriores ha servido para agilizar el tránsito de los usuarios de los diferentes centros, siguiendo las indicaciones establecidas en los protocolos de seguridad, además de contribuir a modernizar y renovar la imagen del Hospital”, ha indicado el director gerente del Hospital Universitario de Jaén, Javier La Rosa.
Cabe recordar que paralelamente se han reorganizado los diferentes accesos al Hospital Médico Quirúrgico, el Materno Infantil y Centro de Diagnóstico, identificando cada uno de ellos con un mapa numérico que facilita el acceso racional de usuarios y pacientes dependiendo de los servicios a los que se dirijan. Con esta medida, el Hospital ha buscado redistribuir el tránsito por los diferentes edificios de manera efectiva, ágil y cómoda y, además, permitir el cumplimiento estricto de las medidas de seguridad implantadas en los mencionados protocolos de seguridad frente al Covid-19.
La actuación, que asciende a 200.985 euros, se enmarca en las obras de emergencia que la Junta de Andalucía está llevando a cabo a través de la Consejería de Salud y Familias desde el inicio de la pandemia y que, en la provincia, han conllevado una inversión total de más de 12,3 millones de euros y busca mejorar la accesibilidad y evitar el contacto de los usuarios con la instalación como medida de protección frente al Covid-19.
