El Ayuntamiento de Jaén acomete estos días obras de mejora de la accesibilidad en una de las vías más importantes de la capital, la avenida de Madrid, con el objetivo de trazar un itinerario más acorde a las necesidades de las personas con movilidad reducida.
El edil de Mantenimiento Urbano, Javier Padorno, explica que se ha rebajado el acerado para construir rampas en una decena de pasos de esta céntrica vía que además conecta servicios muy importantes, desde educativos hasta asistenciales y administrativos, pasando por la propia estación de autobuses. Además del rebaje se han colocado en estos pasos de peatones baldosas podotáctiles específicas para personas con deficiencia visual que además facilitan el rodaje. El objetivo es contribuir a proporcionar un itinerario más accesible y con menos barreras en esta avenida desde su confluencia con el Polígono del Valle hasta Puerta Barrera.
El Ayuntamiento de Jaén ya ha realizado labores de mejora de accesibilidad específicas y también ha implementado este factor en todas las obras en las que la calle o la plaza lo permitan. De esta forma han sido más de un millón de euros los que de una forma u otra, tanto en adecuación de calzadas como de acerados, han permitido una mejor movilidad. Entre otros, destacan los trabajos en calle La Luna, el acceso al campo de fútbol y el cementerio desde la Avenida de Granada, Fuente de la Imora, Menéndez y Pelayo, y algunos tramos de la Plaza Sagrado Corazón de Jesús. También destacan las intervenciones en Eduardo García Maroto, el acerado de la rotonda de la Pajarita, la rampa de acceso en la calle Luis Braille, Virgen del Carmen, La Salobreja, la Carrera de Jesús y el barrio de El Tomillo. En muchos de estos puntos se ha cambiado el concepto de acerado y calzada a dos alturas por el de plataforma única, que mejora los desplazamientos a pie para personas con movilidad reducida o personas que portan carritos de bebé.
En otros casos, como por ejemplo las obras que se realizan en La Glorieta, se ha procedido a la ampliación del acerado hasta los 1,7 metros eliminando además obstáculos recolocando farolas y otros elementos del mobiliario urbano. Padorno destaca el trabajo coordinado con colectivos sociales como Aspaym y Fejidif, “que nos permite por primera vez en el Ayuntamiento establecer de forma coordinada y sostenida en el tiempo intervenciones de eliminación de barreras arquitectónicas en aquellas calles y plazas en las que programamos obras de mejora de su estado. No cuesta mucho más y supone un avance en nuestro concepto de mejorar la calidad de vida de las personas”, resume.
