La subdelegada del Gobierno de España en Jaén, Catalina Madueño, ha puesto en valor el trabajo de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en la lucha contra el comercio ilegal de tabaco en la provincia. En este sentido, ha destacado que la Policía Nacional y la Guardia Civil se incautaron 91.394 kilos de picadura a lo largo del año 2020, “lo que supone la mayor cantidad en los últimos seis años”, según los datos oficiales del Comisionado para el Mercado de Tabacos.
Así lo ha destacado durante la inauguración de las jornadas sobre “El comercio ilícito de productos del tabaco”, organizada por la compañía tabaquera Philip Morris Spain, en colaboración con la empresa Logista, y en la cual participaron alrededor de cien mandos y agentes pertenecientes a la Guardia Civil, la Agencia Tributaria, la Policía Nacional y Policía Local de la provincia.
En este sentido, ha recordado que en la provincia se han desarrollado algunas de las grandes operaciones policiales contra esta actividad delictiva, por lo que ha felicitado a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad y los ha animado a mantener su propósito “con la misma dedicación y esfuerzo que hasta ahora”.
La subdelegada, quien ha estado acompañada del jefe de la Comandancia, el teniente coronel Francisco José Lozano, y el del inspector jefe de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Comisaría, Tomás García, ha enumerado los “considerables perjuicios” que conlleva el tráfico ilícito de este producto. En este sentido, Catalina Madueño ha destacado, en primer lugar, los graves riesgos que supone para la salud el consumo de tabaco fuera de los circuitos legales. “Las mafias ponen estas mercancías en la calle sin control sanitario alguno. No sabemos cuál es su composición ni en qué condiciones se ha fabricado ni cómo puede afectar a quién las consume. Tampoco a qué personas llega, con lo que menores de edad quedan totalmente expuestos”, ha expuesto.
Además, la subdelegada también ha hecho hincapié en las importantes consecuencias negativas que el contrabando de tabaco tiene en las arcas públicas. Así, Catalina Madueño ha explicado que si la picadura aprehendida el año pasado en la provincia se hubiera comercializado por los circuitos legales, hubiera generado más de 10 millones de euros de impuestos: “¿Se imaginan cuántas carreteras podríamos construir con esos impuestos”, se ha preguntado durante su intervención.
La subdelegada también ha recordado los problemas que este comercio ilegal genera en los estanqueros, en especial, en los 238 establecimientos expendedores en la provincia, y en los legítimos trabajadores de este sector. “Me preocupa porque ellos son los grandes damnificados y sufren las consecuencias. El contrabando sigue pesando como una losa sobre la sociedad en general, pero en especial sobre estos profesionales”, ha dicho.
Por ello, Catalina Madueño ha reiterado su compromiso de seguir trabajando de forma conjunta entre la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Agencia Tributaria, y también el sector, “para ganar la batalla a la venta ilegal de tabaco”. “Los resultados, hasta ahora, están siendo positivos, con un notable incremento de las aprehensiones en la provincia. Pero tenemos que continuar y profundizar en cuestiones como la coordinación, la prevención y la investigación”, ha agregado.
Por último, la subdelegada ha hecho un llamamiento a la colaboración ciudadana: “El papel de la ciudadanía es fundamental para frenar el comercio ilegal, bien denunciando la venta ilícita o bien no participando en la cadena de comercialización o de consumo. Los consumidores constituyen la pieza clave, si dejan de adquirir productos ilegales, el contrabando se acaba”, ha concluido.
El objetivo fundamental del evento radica en el intercambio de conocimientos y la concienciación sobre la problemática del comercio ilícito del tabaco, mediante la colaboración de todas las instituciones público-privadas implicadas en la prevención y persecución de dicha tipología delictiva.
En el encuentro formativo, celebrado en el salón de actos del Colegio Miguel Castillejo de Jaén, se trataron las actividades ilícitas sobre productos del tabaco existentes en el territorio español, su relación como fuente de financiación del crimen organizado, así como la legislación vigente aplicable. El programa de la jornada formativa contó con las intervenciones de distintos representantes de Philip Morris y Logista, así como con la participación de expertos de la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía.
La realización de la jornada, que se celebró cumpliendo con todas las medidas y protocolos de la COVID-19, se engloba dentro del programa de inteligencia y prevención desarrollado por Philip Morris desde hace varios años, en colaboración con el Departamento de Seguridad de Logista, centrado en compartir la información más reciente sobre el comercio ilícito y por el que ya han pasado más de 6.000 agentes de toda España desde el año 2015.
El comercio ilegal de tabaco, además de los riesgos que ocasiona a los posibles consumidores como consecuencia de la falta de regulación y control sanitario de sus productos, conlleva un gravísimo fraude al Estado y unas cuantiosas pérdidas fiscales cada año. Según el último estudio de paquetes vacíos IPSOS, se calcula que aproximadamente el 9,5% de los cigarrillos consumidos en España no han tributado los correspondientes impuestos, además del importante auge del fenómeno de fabricación clandestina de cigarrillos, vinculado a la falsificación de marcas de tabaco con la involucración de organizaciones criminales internacionales.
