Jesús Aguirre presenta el equipo quirúrgico, que permite técnicas de vanguardia mínimamente invasivas con la máxima precisión.
El Hospital Universitario de Jaén contará desde el mes de enero de 2022 con cirugía robótica asistida por sistema Da Vinci, una modalidad quirúrgica que permitirá realizar operaciones complejas con abordaje mínimamente invasivo, que proporciona una excelente calidad asistencial y que será referente para este tipo de cirugías de toda la provincia de Jaén.
El consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, que ha presentado hoy este nuevo equipo en el hospital jiennense, señala que “la cirugía asistida por robot se ha identificado como una técnica que aporta mayor seguridad en las intervenciones quirúrgicas, menos tiempos de convalecencia, homogenización en las maniobras quirúrgicas, y un salto cualitativo en el tratamiento de ciertas patologías que lo hacen especialmente beneficioso para el paciente, los cirujanos y el sistema sanitario”.
El robot, que se instalará en la segunda planta del Hospital Médico-Quirúrgico, comenzará a utilizarse en operaciones de Urología, Cirugía General, Ginecología, Cirugía de Tórax, Otorrinolaringología, Maxilofacial y Cirugía Pediátrica, para extenderse posteriormente a otras especialidades. El responsable del equipo quirúrgico que lidera su puesta en marcha es el jefe de Servicio de Urología del hospital jiennense, Juan Moreno.
Las principales características del equipamiento tecnológico robótico para cirugía son la visión en 3 dimensiones inmersiva y magnificada, lo que permite al cirujano ver el campo quirúrgico como si estuviera dentro del cuerpo del paciente, aumentando hasta 10 veces el nivel de detalle. Además, posee 4 brazos robóticos que transmiten los movimientos de las 2 manos del cirujano, permitiéndole mayor amplitud de movimientos, más precisión y eliminación el temblor del puso. Todo ello combinado con las tecnologías más avanzadas de instrumentalización robótica y de software, que proporciona a los cirujanos una herramienta de gran valor para los pacientes.
Debido a su versatilidad, precisión y comodidad, ofrece a los pacientes una recuperación postquirúrgica más rápida y reduce el riesgo de complicaciones de la cirugía tradicional como el sangrado o menor daño de los tejidos, reintervenciones, transfusiones de sangre, fármacos para el dolor, o tratamientos por infecciones quirúrgicas, entre otras ventajas. De hecho, la estancia media del paciente en el hospital se reduce, lo que provoca que a medio y largo plazo el sistema sanitario sea más eficiente.
“Gracias al procedimiento administrativo, que está a punto de adjudicarse, de contratación mixta de suministro y mantenimiento de dos equipos con destino el Hospital Universitario de Jaén y el Hospital Universitario ‘Juan Ramón Jiménez’ de Huelva, el Servicio Andaluz de Salud logrará disponer de esta tecnología en todas las provincias del territorio andaluz, suponiendo un baluarte para la práctica clínica y un reclamo importante para retener el talento médico en nuestros centros sanitarios”, ha indicado Aguirre, que señala que el presupuesto para el equipo jiennense y su mantenimiento integral es de 2,9 millones de euros. “Esta inversión sitúa a Andalucía a la cabeza de la cirugía robótica a nivel nacional en lo que respecta a oferta al ciudadano y equidad, siendo la segunda comunidad en número de equipos robóticos”, ha indicado Aguirre.
Estos equipos requieren de una formación específica destinada a los profesionales que desarrollarán su trabajo con ellos. Para agilizar su puesta en marcha, el Servicio Andaluz de Salud ha desarrollado a lo largo de este año un programa de formación continua con simuladores robóticos para profesionales el Hospital Universitario de Jaén y resto de centros, lo que permitirá comenzar a operar pocas semanas después de la llegada de los citados equipos.
“Sin duda la incorporación de estos equipos supondrá un salto cualitativo, y cuantitativo, para los resultados en salud de la población jiennense, pero es más importante no olvidar que estos dispositivos no son más que una herramienta para los auténticos protagonistas del proceso quirúrgico, que son los profesionales que participan en el mismo, pues, sin su capacidad clínica, de cuidados, de gestión y servicio, ninguna tecnología tendría valor”, ha recordado Aguirre.