CAMPAÑA JUGUETES
Acompañada del director general de Consumo, José Agustín González, ha informado que, de las 417 actas levantadas, 79 presentaban incumplimientos de etiquetado y 18 muestras problemas de seguridad.
La consejera de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, Catalina García, ha participado en un acto para dar a conocer la campaña que se ha llevado a cabo desde la Dirección General de Consumo con el objetivo de intensificar el control del etiquetado y seguridad de casi medio millar de juguetes de cara a los regalos que se realizan en fechas navideñas.
Así, junto al director general de Consumo, José Agustín González, ha subrayado la importancia de estas campañas, sobre todo, al tratarse de productos que van dirigidos a la población infantil y juvenil “que requieren de una especial y permanente vigilancia”. “Trabajamos para garantizar que estos productos cumplan todas las medidas de seguridad que exige la normativa”, ha agregado.
El objetivo principal de esta campaña de inspección es comprobar que los juguetes dispuestos para la venta para menores de 14 años están debidamente etiquetados, de acuerdo con la legislación aplicable a estos productos, y cumplen con los requisitos de seguridad exigidos. Cabe remarcar que esta campaña se ha puesto mayor hincapié en los establecimientos de precio reducido y bazares, al presentar sus productos más habitualmente incumplimientos tanto en etiquetado como en seguridad, sobre todo de aquellos productos importados de países asiáticos.
En este sentido, ha resaltado que durante esta campaña, que se ha desarrollado desde verano hasta el pasado 10 de diciembre en toda la comunidad autónoma, de las 417 actas levantadas, 79 presentaban algún incumplimiento de etiquetado, lo que supone un 18,94% del total. En cuanto a la toma de muestras remitidas a laboratorio para su ensayo, de las 66 tomadas, 18 resultaron positivas por problemas de seguridad (27,2%).
En el caso de la provincia de Jaén, se han controlado un total de 27 productos diferentes entre controles de etiquetado (19) y muestras (8). En concreto, se han vigilado los siguientes productos: martillo sonoro, tambor, bola yoyó, sonajero, set de xilófono y trompeta, palmas sonoras, pandereta, trompeta con fuelle, guitarra y cometa.
“Si se detectan productos inseguros, se incluyen en la Red de Alertas de productos de consumo y se procede a su retirada del mercado”, ha remarcado. Entre los juguetes en los que se ha encontrado problemas de seguridad se encontraban panderetas, pelotas pequeñas, puzzles de goma, espantasuegras, trompetas de fiesta, globos, libro juguetes o sonajeros.
Al hilo de esto último, ha señalado que, de la campaña de inspección del ejercicio pasado, se han incoado 100 expedientes sancionadores que llevan asociadas sanciones por una cuantía media de 2.186,19 euros. Y es que, en 2021 se levantaron 544 actas, de las 127 resultaron positivas (23,3%). De las 136 muestras recogidas el pasado año, 45 dieron como resultado problemas de etiquetado o seguridad (33%).
“Estas campañas periódicas, dentro de nuestro Plan de Inspección de Consumo, son fundamentales para ejercer una adecuada vigilancia, control e inspección. Con el propósito de prevenir y sancionar la elaboración, utilización, circulación y oferta en nuestra comunidad autónoma de bienes y servicios que no cumplan las condiciones reglamentariamente exigidas para garantizar la salud y la seguridad de los consumidores, de acuerdo con la legislación vigente”, ha añadido.
En los controles que planifica la Dirección General de Consumo, el personal inspector comprueba diferentes aspectos como la existencia del marcado CE, e incide en las advertencias a las personas consumidoras, en especial para aquellos productos que, por sus características, requieren de un especial cuidado. Por ejemplo, que señalen que el juguete ‘No conviene para niños menores de 36 meses’; que estén colocadas de forma visible y legible; que indiquen que sólo se utilice el juguete ‘bajo la vigilancia directa de una persona adulta’.
Recomendaciones a la hora de adquirir juguetes
Las conclusiones de esta campaña han sido, por un lado, respecto a los controles de etiquetado, un leve aumento de incumplimientos en relación con el marcado CE y de los símbolos gráficos de limitación de edad o precaución del juguete. En relación con las muestras, se registra un descenso respecto al año anterior (27,2% frente al 33%). En la mayoría de estas muestras, durante el juego se desprenden o generan piezas pequeñas que, de ser tragadas, pueden provocar asfixia en el niño.
“Nuestra recomendación es leer detenidamente las etiquetas y elegir siempre juguetes en función de la edad del niño; evitar que éstos transmitan valores sexistas, violentos o racistas; probar, si es posible, el juguete en la tienda donde se vaya a comprar; apostar siempre por comercios responsables donde exista información y atiendan a posibles reclamaciones”, ha agregado.
Por otro lado, ha reseñado la importancia de deshacerse de los plásticos y envoltorios de los juguetes, ya que pueden resultar peligrosos: los plásticos duros pueden provocar cortes, y los plásticos blandos, causar asfixia. Además, de ser respetuosos con el medio ambiente a la hora de deshacernos de los plásticos y envoltorios de los juguetes.
PEGI en los videojuegos
Por su parte, el director general de Consumo también ha incidido sobre otros productos que también son muy solicitados por los niños como regalos de Navidad, los videojuegos, y ha recordado que los padres, madres y personas tutoras deben orientarse por el sistema de clasificación PEGI a la hora de adquirir juegos destinados a la población infantil.
El sistema Europeo de Información de los Juegos es un etiquetado específico para los videojuegos que permite identificar con facilidad la edad recomendada para su uso, además del contenido sensible (violencia, sexo, drogas, lenguaje soez, etcétera). De esta manera, existen hasta cinco indicadores para la edad y tres colores en la información que se proporciona: PEGI 3 y PEGI 7 (verdes); PEGI 12 y PEGI 16 (naranjas); y PEGI 18 (rojo).
Como información complementaria, en el embalaje o ficha descriptiva del videojuego también se incorporan los descriptores de contenido, que son pictogramas que ofrecen una descripción más precisa de los contenidos, a saber: Violencia (dibujo de puño), Lenguaje soez (insulto), Miedo (araña), Juego (dados), Sexo (símbolos femenino y masculino entrelazados), Drogas (jeringuilla), Discriminación (dos figuras blancas y una central negra), y una última, que indica que el juego ‘Incluye compras’ (posibilidad de comprar bienes o servicios digitales con dinero real).
Las personas consumidoras y usuarias pueden encontrar la información detallada sobre el etiquetado y clasificación de videojuegos en la web de Consumo Responde.
Consumo Responde
Ante cualquier duda o consulta en materia de consumo, la ciudadanía puede contactar con Consumo Responde, un servicio gratuito de información y asesoramiento a las personas consumidoras y usuarias, impulsado por la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía. Se trata de un servicio multicanal, al que se puede acceder de forma continuada a través del número de teléfono 900 21 50 80, de la página www.consumoresponde.es, del correo consumoresponde@
También se puede recibir asesoramiento en los Servicios Provinciales de Consumo de las delegaciones territoriales de Salud y Consumo presentes en todas las capitales de provincia, así como en las Oficinas Municipales de Información al Consumidor (OMIC), y en las organizaciones de personas consumidoras y usuarias.